Una vez mazado el entre-cotte y salado convenientemente, se hace freír en una sartén
ligeramente untada de manteca de vacás, depositándolo en la fuente o plato una
vez en punto.
En la misma sartén se pone una pequeña
cantidad de caldo, la mitad de vino de Jerez, el zumo de un limón, una cdita de
harina tostada, un punto de pimienta y setas cortadas en rebanadas finas.
Se hace cocer todo por espacio de 5’ añadiendo
esta salsa, una vez cocida, al entre-cotte,
y sirviéndolo muy caliente, guarnecido con ensalada de berros o cogollos de
lechuga, o mejor aún sobre una tostada de pan, dorada en manteca de cerdo.
Carnes - 05. - 048
No hay comentarios:
Publicar un comentario