1 pollo tierno, 1 trozo de jamón seco, 75 g de manteca de
cerdo o aceites, caldo o agua, cebolla, coñac, sal, aceite.
Una vez bien limpio el
pollo se espolvorea de sal por dentro y se le mete una cebolla pequeña, jamón
en un trozo como se quiera de grande.
Se ata como de
costumbre con un cordelito fino y limpio y se unta bien de manteca.
En un poco de aceite
se fríen unos trocitos de jamón, luego se quitan y el aceite se echa en una
tartera, donde ya tenemos al pollo, se cubre la cacerola con papel de estraza o
blanco, fuerte y limpio y se coloca la tapadera encima, metiéndolo a horno
moderado.
Si no se tiene horno
puede hacerse sobre la chapa.
Se le da alguna vuelta
y cuando esté dorado se agregan tres o cuatro trozos de cebolla, luego se rocía
con un chorrito de coñac, se vuelve a tapar y se deja asar suavemente.
Al jugo del pollo se
le agrega un buen chorro de caldo o a falta de éste, agua.
Se deja hervir un
poco, luego se le quita la grasa con una cuchara y se sirve en salsera.
Puede acompañarse con
una guarnición de cebollitas cocidas y rehogadas, patatas avellanas, etc.
Se sirve caliente.
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