En un puchero de barro a la lumbre con agua
fria se pone, todo en crudo, unas lentejas ya lavadas la cara, una cabeza de
ajos, una hojilla de hierbabuena o de mejorana, un rabillo de cuchara de
pimentón dulce, unas rodajas de morcilla de arroz y un cacho de tocino gordo
alunado.
Cuando pasen unos minutos se echa la sal y se
dejan cocer tranquilas a su aire
Nota: La lenteja española -dice
Luis Antonio de Vega- es una señora lenteja, una gran dama que se está
aliviando el luto y que solo admite como adorno un poquito de morcilla o un
trocito de chorizo
Fuente:
Alfredo Juderías
Guisos y potajes - 14. - 031
No hay comentarios:
Publicar un comentario