400 g de harina
120 g de azúcar
1 corteza de limón rallada
Una pizca de vainilla en polvo
Una yema de huevo
2 cda de ron negro
250 g de mantequilla
3 cdas de azúcar en polvo
300 g de mermelada de albaricoque
Una pizca de sal
Se tamiza la harina, y haremos con
ella como un cono de volcán. En el centro y poner en el centro el azúcar, la
sal, la corteza de limón rallada, la vainilla, el ron y la yema de huevo. La
mantequilla la distribuiremos en trocitos por la masa según la vamos haciendo,
se fundirá con el calor de las manos. No amaseis, sino que mezclar los
ingredientes sin presionar mucho. Lo que os saldrá es una masa quebrada. Ahora
envolveremos la masa en film alimentario o en papel de aluminio dentro de la
nevera durante un par de horas. Precalentaremos el horno a unos 180º. Extender
la masa sobre una mesa enharinada con ayuda del rodillo. Debe tener unos 3 mm
de espesor. Con un corta pastas circular cortar la masa en discos y aros del
mismo tamaño.
Cocer ambos (separados) en el horno
durante 10-15’ con la bandeja a media altura. Una vez cocidas desprendedlas de
la placa, con ayuda de una espátula o un cuchillo ancho y colocadlas sobre una
rejilla. Ahora espolvorear los aros con azúcar en polvo. Calentar la mermelada
en un cazo a fuego lento, o bien al mínimo en el microondas. Untar con ella los
discos y colocar encima los aros. Rellenar con más mermelada el centro. Antes
de guardarlas hay que dejar que se sequen bien.
38. Pasteleria
No hay comentarios:
Publicar un comentario