1 zapallo de color de su preferencia, sal, aceite de oliva o manteca.
El zapallo puede hervirse entero
muy despacho, en trozos con corteza, sin corteza, siempre suavemente.
Una vez uniformemente cocido se
hace puré manualmente, sin procesar, agregando la nada, sal, aceite bueno de su
preferencia o manteca.
Tenga presente que es un plato
aconsejado para convalecientes o heridos por los excesos de la comida.
Acompaña espléndidamente una
pechuga de pollo, abierta a mariposa, a la plancha o a la sartén, rociada en su plato con un hilo de aceite del
bueno, de maíz, de girasol primera presión, de oliva extra virgen....
Agua mineral o un vinito blanco
suave. ¡A veces conviene enfermarse un
poco para comer bien!
Es el zapallo de color que se
destina para hacer puré.
La variedad empleada depende de la
preferencia del que lo va a comer. Casi siempre disponible, por practico y
rendidor, de buen sabor y poco fibroso yo me inclino por el "anco".
No hay comentarios:
Publicar un comentario