Se saltean los pollos en dos o
cuatro trozos (según sean de grandes) con aceite fino y manteca de vaca, unos
cuadraditos de jamón, cebolla, sal, pimienta y hierbas aromáticas. Cuando
empiezan a tomar color se rocían con jerez o vino blanco; cuando está reducido
todo esto se mezcla con el jugo un poco de salsa de tomate, se tapa la cacerola
y se mete al horno un cuarto de hora; se guarnece la fuente con fondos de
alcachofa cocidos y salteados separadamente.
Aves y caza - 03. - 037
No hay comentarios:
Publicar un comentario