Una gallina de buen tamaño, medio cucharón de aceite, medio cucharón
de manteca de cerdo, 3 dientes de ajo, 3 yemas de huevo, medio limón, bastante
perejil picado, caldo, 1 pedacito de laurel, sal y pimienta blanca molida.
Váciese, flaméese la
gallina, límpiese con un trapo y fríase en una cacerola al fuego con aceite y
manteca hasta dejarla bien dorada por todo; fríanse igualmente los ajos.
Una vez dorado exprímase
medio limón y añádase caldo hasta cubrir la gallina; añádanse laurel y perejil
picado; salpiméntese y déjese cocer a fuego lento hasta que esté tierna.
Retírese entonces la gallina,
déjese en un plato y consérvese al calor; retí¡ense también los ajos y el
laurel y hiérvase la salsa hasta dejarla de buena consistencia y en la cantidad
necesaria.
Añádanse entonces las
yemas desleídas antes con un poco de caldo frío, caliéntese sin que rompa el
hervor y viértase por encima de la gallina.
Sírvase.
Aves y caza - 03 .050
No hay comentarios:
Publicar un comentario