En una sartén a la lumbre, con aceite o
manteca de cerdo, se frie bastante cebolla blanca, cortada a lo ancho, hasta
que tome un ligero color dorado
Entonces se aparta y, en ese aceite, se rehoga
la asadurilla previamente sazonada y cortada en cachejos como nueces
Cuando esté se añade la cebolla y se voltea
con una cuchara de madera de rabo largo
Se machacan, en un almirez, un par de ajillos
pelaos, una ramilla chica de perejil y un rabillo de cuchara de pimentón rojo
Se diluye con un chorrillo de buen vinagre y
se vuelca en la sartén dejando que tome regosto.
Nota: Puede añadirse, si gusta,
unas rodajillas de guindilla y unas patatas fritas de antemano.
Fuente:
Alfredo Juderías
Despojos - 08. - 031
No hay comentarios:
Publicar un comentario