-Oiga usted, perdone la
curiosidad, ¿usted
cuando come huevos fritos,
toma siempre
cinco?
Camilo José Cela
(Viaje a la Alcarria)
Para que nunca digan "esta mujer no sabe
freir un huevo" haz lo siguiente:
Busca una sartén que sea pequeñita y chata ya
que si es grande la clara se extiende
Pon en ella abundante aceite de oliva y
caliéntalo bien
-Cuando esté humeante desliza un huevo,
previamente cascado en un platito de postre
-Ayudado por una paleta arrima la clara a la
yema y echa un poquillo de la grasa por encima
Cuando empiece a dorarse se saca con la
espumadera; se deja escurrir sobre la sartén, se pasan a un plato y A la mesa
dejando que cada uno eche la sal que quiera pero, si como dice Luis Antonio de
Vega, "eres docto en la degustación de huevos fritos no le pongas sal en
la yema sino en la clara"
Al servir pueden mojar, si gusta, con un
hilillo de vinagre e incluso una pizquita de pimienta
Nota: Algunas viejas guisanderas
aconsejan sustituir la sartén por una cazuelilla de barro cocido ya que, dicen,
se arrebatan menos
Fuente:
Alfredo Juderías
Huevos y tortillas - 16. - 031
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